lunes, 23 de abril de 2012

LA CULTURA NAZCA


                     LA CULTURA NAZCA


Nazca es una cultura arqueológica del Antiguo Perú que surgió en la provincia de Nazca (departamento de Ica) alrededor del siglo I y entra en decadencia en el siglo VI. Se ubicó a orillas del Río Grande entre los años 300 a.C. a 600 d.C.
Tuvo un área de influencia que llegó a abarcar hasta Pisco por el norte, hasta Arequipa por el sur y por el este hasta Ayacucho. Hasta el siglo VI d. C., aumentaron sus contactos con la zona andina, llegando inclusive hasta las zonas altas de Ayacucho. Este contacto tuvo especial importancia en la formación de la cultura Huari.
Un aspecto impresionante de Nazca es su cerámica policromada, con figuras de hombres, animales, plantas, etc. En muchas de estas cerámicas, se representan a hombres mutilados. El arte textil floreció tanto como en la época de los Paracas. Tuvieron un estilo propio de trabajo de los metales, aunque de menor calidad al de la época de Chavín.
Lo más impresionante de esta civilización son los trazos efectuados por los Nazca en las Pampas de Nazca y en otros sitios de la costa sur del Perú. Los trazos conocidos como Líneas de Nazca se ubican en una zona geográfica con pocas precipitaciones, lo que demuestra conocimientos de geografía y meteorología. Como dato sumamente interesante y que refuerza la teoría del conocimiento meteorológico de los Nazcas.

Costumbres

Cabeza trofeo de la cultura Nazca.
Unas de las costumbres de la cultura de Nazca era:
  • Los trabajos que ellos realizaban la mayoría de veces era acompañados por un banquete que casi siempre era chicha con varios alimentos.
  • Existen testimonios de cultos individuales como ofrendas en forma de atados.
  • Hay también testimonios de cultos colectivos, de consumo de alimentos en recipientes ceremoniales y acompañamiento musical con ataras y tambores.
  • Otra costumbre que tenían era que cuando por alguna razón se juzgaba que la huaca residente en el templo perdía su poder o estaba descontenta, la comunidad procedía a reconstruirla. Se derrumbaban los techos y las paredes y se quebraban las columnas, pero los cimientos era cuidadosamente sepultados y sellados. Sobre la plataforma se construía un nuevo ambiente de culto. El número de reconstrucciones guardaba relación con la importancia y el poder político de la comunidad encargada de su culto.
  • Ellos estaban acostumbrados a los sacrificios humanos en rituales religiosos o en ceremonias bélicas.
Modificaban las cabezas de las personas (muertas), adornándolas y tejiéndolas, para hacer sus ritos, como una ofrenda a sus dioses.

1 comentario: